Habrá un día sin fin
y un diálogo eterno
y saldrán lentamente
esas palabras hondas
que hoy se quedan dormidas
porque nada, ni nadie, sabrían
contestarlas.
Diálogo sin voz...
frente a frente contigo,
en Ti, dentro del Todo
absoluto y perenne.
En la entraña del Verbo
sobrarán los sonidos.
¡Qué decir indecible
entre labios sellados!
El vacío de hoy
se colmará de cielo
y arderá para siempre
este fuego que callo;
esta palabra honda
que me pesa tan dentro
porque nadie sabría ahora
contestarla.
Ernestina de Champourcin
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Todos los comentarios son bienvenidos, este es un espacio de escucha y oración.