martes, 29 de octubre de 2013

Conducta suicida en jóvenes mexicanos



Autor-es: Albert Junior González Cruz*; Ma. del Rocío Figueroa Varela*; Ma. de los Dolores Valadez Sierra**.. *Universidad Autónoma de Nayarit

** Universidad de Guadalajara


En México, el suicidio es la segunda causa de muerte entre los jóvenes, sin embargo estas conductas están subsumidas en los datos de muertes violentas. En la provincia de Nayarit, en 2010 se registró un incremento del 16% en comparación a 2008 de muertes por suicidio, por lo que es una problemática que se suma a la ya complicada perspectiva de la vida juvenil que implica grandes costes humanos y sociales al país. El objetivo de la investigación, se centró en conocer de los jóvenes que cursan educación media superior, riesgos que se asocien a la prevalencia de ideación suicida, como el tipo de ajuste emocional y social, control de impulsos, autoestima y depresión. La investigación de campo fue de tipo transversal y descriptivo, aplicándose instrumentos psicométricos a una muestra probabilística de 179 estudiantes. Los y las estudiantes refieren depresión moderada en 26% y el 1% depresión grave. El 11% de las mujeres y 3.4% de los hombres, informan haber tenido al menos un intento de suicidio. Los datos indican altos índices de problemas en ajuste emocional y social, así como baja autoestima, lo que puede orillar a efectuar conductas suicidas. Es imprescindible que se efectúen acciones puntuales para el rescate del desarrollo y salud mental de los y las jóvenes.



http://www.psiquiatria.com/articulos/psicologia/57564/

viernes, 25 de octubre de 2013

Nora, adicta y atea: El vacío, los desórdenes alimenticios, el alcohol y luego las drogas le podrían haber llevado al suicidio.


Nora es una joven de Viena que publica su testimonio de conversión y superación cuando tiene 28 años. El vacío, los desórdenes alimenticios, el alcohol y luego las drogas le podrían haber llevado al suicidio, como a su ex-novio.

Lo que le salvó fue descubrir que creer en Dios no era "ser débil", como pensaba, sino todo lo contrario: la fe era una fuerza para admitir los errores, la realidad, y poder empezar un cambio radical.

Anorexia y aislamiento
"Al comenzar mi adolescencia sentía un profundo vacío dentro de mí que se manifestaba en la anorexia", explica Nora. "En poco tiempo me aislé de todo y de todos, no quería que me molesten, vivía en mi mundo, me pesaba ser prisionera de mi propio cuerpo. Me trataba a mí misma con dureza, pero en la relación con los demás me sentía frágil e insegura, pensaba que no era inteligente, bella o fuerte como mis coetáneos".

Una familia rota
Se fue alejando de su familia, que además sufría su propia crisis. Cuando ella tenía 18 años sus padres se divorciaron. Y ella no quería sentir dolor: quería ser, o al menos parecer, fuerte, dura.

"No quería sentir el dolor, las inseguridades, el miedo y todo el sentimiento de culpa", recuerda. ¿Y cómo se combaten esos sentimientos en una cultura materialista? Con pastillas y sustancias.

"Comencé a tomar fármacos antidepresivos, calmantes, y caí en la oscuridad de las tinieblas. Gracias a Dios, mi padre y su compañera me vieron, me llevaron a su casa por un año y me ayudaron mucho. Al principio mi padre trató de ayudarme de distintas maneras, y aunque yo lo rechazaba, él siguió cerca".



Trabajo y oración: el Cenáculo
Finalmente, su padre decidió enviar a Nora a Italia, a la Comunidad del Cenáculo, una comunidad católica donde los jóvenes adictos viven juntos en una misma casa, realizan mucho trabajo físico y manual y mucha oración.

A cada recién llegado se le asigna un "ángel" o "acompañante", que es un ex-adicto, alguien que ya ha pasado por el proceso, que se sabe todos los trucos del adicto, sus mentiras incesantes, dónde esconde la droga o el alcohol, sus justificaciones... y que no cede ante ellas.

Nora fue al Cenáculo muy en contra de su voluntad, con la sensación, simplemente, de que su padre quería alejarla de casa pero no tenía elección. No le gustaba tener que estar en otro país, tener que aprender italiano, tener que compartir el lugar con tantas chicas, y dejar sus adicciones. Pero su padre había sido claro al enviarla: “Si vuelves a casa, tu vida será un infierno”, le había dicho. "Sus palabras permanecieron dentro, me sacudieron", señala la joven austriaca.

La vida en el Cenáculo era dura: mucho trabajo, mucha oración, nunca sola. Pero eso era liberador.

Comunidad y fe
"En poco tiempo, la forma de vida de la Comunidad, el quererse bien, encontrarse, estar atento a las necesidades del otro, me tocaron mucho y quería ser parte de esta familia", explica.

Y más aún, había una fuerza poderosa que antes había despreciado y ahora le atraía: la fe.

"Encontré la fe. Antes no la conocía porque era atea. En el pasado, para mí creer en Dios significaba ser débil, en cambio, descubrí que la fe es la fuerza que te permite decirte que eres débil y que necesitas ayuda".

La fe era todo lo contrario que autoengañarse, todo lo contrario de lo que ofrece cualquier adicción con su escapismo: la fe permitía afrontar la realidad de cara.

"La primera vez que vi a las chicas que se levantaban de la mesa para decir con sinceridad, delante de todos, que habían cometido un error, como robar o hacer algo a escondidas, me quedé con la boca abierta: me latía fuerte el corazón por su coraje de sacar afuera la basura de la mentira y la falsedad. Yo nunca había sido capaz de afrontar un problema, de decir la verdad", apunta Nora.

"Con seis meses de Comunidad le escribí a mi padre por primera vez diciéndole que había decidido quedarme, que quería elegir la vida. Después de un tiempo supe que mi padre había recibido mi carta justo el mismo día que mi ex novio se había suicidado. Para mí fue un golpe, pero al mismo tiempo me hizo entender cuánta libertad tenemos para elegir y como podría haber terminado mi vida".

Poder hablar y abrir el corazón
La sinceridad, el poder hablar y poder confiar, cambió a Nora y la llevaba a la generosidad: "Abrirme a las hermanas, pedirles su consejo, creer en su amistad generosa y hacer sacrificios con y para ellas, me sacaba de la pesadez de mi egoísmo".

Y de fondo latía el poder del Misterio y la esperanza, tan distinto al falso control y la esclavitud del adicto.

"Me ayudó ver cuánta esperanza tenían las chicas gracias a la oración y me fascinaba el hecho de no poder entender solo con mi mente la grandeza de Dios. Me hizo mucho bien sentirme pequeña delante de Él y necesitada de su Misericordia. Cuando caía en mi negatividad, en la vergüenza de verme imperfecta, aprendí a buscarlo y a decirme la verdad delante de Él".

Hoy ella ayuda a otras chicas
La experiencia en la Comunidad del Cenáculo transformó a Nora y hoy es ella la que ayuda a otras chicas. "Estoy muy agradecida por haber encontrado a la Comunidad, agradecida a todas las personas que creían que yo cambiaría, especialmente a la chica que fue mi ángel custodio y que luchó junto a mí los primeros meses.Quiero agradecer mucho a las chicas con las que vivo porque me enseñan a amar más y a sonreír a la vida, don precioso que reencontré y que hoy deseo dar".




miércoles, 23 de octubre de 2013

“La hija del sastre” de Juan Carlos Mestre






Hoy 18 de julio martes setenta y cinco aniversario del golpe de estado de Caín
En la televisión las locutoras hablan con tranquilidad de los cometas que pasan rozando la Tierra cada diez mil años
Hacia esta misma hora en León ya ha sido detenido el alcalde Miguel Castaño y los pantanos que aún no esperaban lluvias del tiempo futuro han comenzado a llenarse de sangre del tiempo pasado
Donde termina la provincia hay un castillo con su conde y hay un pueblo dividido por dos ríos y no es necesaria ninguna otra información geográfica
Son las tres de la tarde delante de su almacén de coloniales el comerciante Emilio Silva observa dos criaturas que juegan a descargarse oro en los ojos
Son la hija del sastre y el hijo del panadero
La miel entra en los caramelos y los muchachos comienzan a oír la canción de las estrellas que al atardecer se atolondran en la oscuridad
Ella dijo y él dijo y ambos se dijeron no hay ningún otro camino que nos lleve al mar
Los ríos cambian de pie y las aguas regresan a la montaña
La única música es el canto de las abejas camino de los colmenares
Las cosas que pasaban eran casi todas las cosas que pasan en un pueblo que no aparece en las esferas del mundo
En la alameda los fumadores encienden sus cigarrillos para ser vistos desde las estrellas
La Luna le da la mano al Sol y los antepasados siguen con la conversación bajo los cerezos
Nadie supo nunca imaginar algo así
Los árboles marchan sin dirección a tomar el desvío hacia los paisajes del arrepentimiento
Los verdugos dejan de comer tocino, a las fuentes se les seca la boca
Es septiembre y la tarde tiene el color de la uvas, será monja o será fraile preguntan los dedos que abren el capullo de las amapolas
El último día del verano fusilan al alcalde de Villafranca del Bierzo, Antonio Gabelas y los pensamientos que ya no existen dijeron: Será mejor que te calles
La última mirada se da la vuelta en la ventana de la casa de enfrente
Las mujeres no están preparadas para la inquietud, los amantes no están preparados para el remordimiento, los niños no están preparados para la congoja
La voz se lava las manos, la decisión se lava las manos, los caciques se lavan las manos
Ladran los perros de caza, se esconden los perros de caza, su mirada se inclina como la cabeza de un enfermo
El que oíamos cantar se deja de sentir como dedos que se duermen
Aquellos que no conocíamos salen de cualquier parte dispuestos a permanecer para siempre
Y lo que sucede en un lugar comienza también a suceder en otro como si se borrara un sueño
El sastre termina de hilvanar el traje que su compadre ya no podrá recoger
No se sabe dónde lo han llevado y los días que ya no existen volverán a decir: Será mejor que te calles
En abril del 41 Antonio Abella, vecino de Paradaseca, muere en Mauthausen
Y José Mestre desaparece el primero de febrero del 42 en el campo de exterminio de Gusen
Pasan los inviernos y los veranos que ya no existen seguirán repitiendo: Será mejor que te calles
Sesenta y cuatro años después de la insurrección fascista el nieto de Emilio Silva dueño del almacén de coloniales La Preferida en Villafranca del Bierzo encontrará la fosa de su abuelo en una cuneta a la entrada del pueblo de Priaranza
Según el evangelio de Natan Zach, cuando Dios dijo por primera vez hágase la luz, quiso decir que no quería estar a oscuras
La hija del sastre se inclina sobre la máquina, sus puntadas recorren kilómetros y todo camino interminable se hace más pequeño
La noche se llena de lámparas, hablan con las hojas doradas que aún tienen la cocina encendida
El pelirrojo acebo le dice al espino: Será mejor que te calles Ella dijo y él dijo y ambos se dijeron barrio triste escaparates donde las personas miraban el tiempo el cielo el viento en línea recta de la carretera
El sol vino a acostarse en los retales, el humo volvió a entrar en las chimeneas, la corriente eléctrica regresa a la oscuridad, abre la puerta, salta en el mundo
Se entierran las palabras que esperaban a alguien, se desentierran como niños vivos
Y se va el otoño y regresa la primavera y los cometas pasan
rozando la Tierra una vez cada diez mil años.

sábado, 19 de octubre de 2013

El insomnio puede predecir pensamientos suicidas




Un nuevo estudio confirma una relación entre el insomnio y pensamientos de suicidio, lo que sugiere que la evaluación específica y tratamiento de problemas de sueño concretos puede reducir el riesgo de suicidio en personas con síntomas depresivos, según las conclusiones de la investigación, publicadas en ‘Journal of Clinical Sleep Medicine‘.

“El insomnio y las pesadillas, que a menudo se confunden y van mano a mano, son factores de riesgo para el suicidio y cómo contribuyen era desconocido hasta ahora” dijo el doctor W. Vaughn McCall, autor principal del estudio y director de la Facultad de Medicina del Departamento de Psiquiatría y Comportamiento de la Salud en la Universidad de Georgia Regents (Estados Unidos).

El estudio utilizado pruebas psicométricas para evaluar objetivamente el estado mental de 50 pacientes con depresión que reciben tratamiento hospitalizado, ambulatorio o en el Servicio de Urgencias. Los participantes tenían entre 20 y 84 años, el 72 por ciento eran mujeres y el 56 por ciento previamente había intentado suicidarse al menos una vez.

Los resultados muestran que los participantes tenían un grado moderado de los síntomas del insomnio, en promedio, utilizando el Índice de Severidad del Insomnio. A pesar de que la desesperanza se relaciona con la ideación suicida, no fue significativamente relacionada con el insomnio, las creencias disfuncionales o las pesadillas, pero las tres variables del sueño se correlacionaron con pensamientos suicidas.

Los investigadores detectaron que cuando el insomnio y los pensamientos suicidas eran considerados de forma aislada, el insomnio fue, como era de esperar, un predictor de pensamiento suicida. Cuando el sueño era perturbador o una grave pesadilla, las creencias disfuncionales y la gravedad de actitud se incluyeron en el modelo estadístico, y el insomnio per se ya no estaba relacionado con el pensamiento suicida.

“Resulta que el insomnio puede conducir a un tipo muy específico de la desesperación y la desesperanza por sí mismo, por lo que es un poderoso predictor de suicidio”, afirmó McCall. Según los autores, el estudio sugiere que las pesadillas y las creencias y actitudes disfuncionales sobre el sueño pueden representar nuevas dianas para la prevención del suicidio.


http://www.psiquiatria.com/noticias/trastornos_del_sueno/comorbilidad521/58768/

martes, 15 de octubre de 2013

Un enfermo terminal de 16 años dedica sus últimas semanas de vida en alertar contra el suicidio


Cuando tienes dieciséis años, todo es sueño: la carrera, un futuro noviazgo, metas que conquistar, el futuro. Pero para Donal Walsh el sueño se transformó en pesadilla cuando le diagnosticaron un cáncer terminal que, de golpe y porrazo, desplomó toda aspiración de porvenir: «no tenía palabras para esta sentencia de muerte», dijo él. Y, no obstante, algo sucedió que transformó este drama en una historia de esperanza; algo que comenzó con una carta publicada por accidente en un periódico de Irlanda, su país natal.

Nacido en Blennerville, Tralee (Irlanda), su batalla contra el cáncer comenzó hace cuatro años, con un tumor en la pierna, con tan sólo doce primaveras a sus espaldas. Pasó por quirófano y por quimioterapia, lleno de enojo y preguntas; mucho qué pensar y mucho tiempo a disposición.

Cuando todo parecía solucionado, volvieron las noticias de mal agüero: otro tumor, pero ahora en un pulmón. Resignado, regresó al camino que había jurado nunca volver a recorrer. Pero era eso o morir. Optó por luchar de nuevo.

Pero lo extraordinario de Donal no es sólo su fuerza de voluntad, sino el uso que ha hecho de su enfermedad. Viendo, por ejemplo, las condiciones del Our Lady’s Hospital en donde estaba internado, recaudó más de 50,000 euros para el hospital, organizando carreras de montaña, torneos de rugby, cenas y subastas. Se lanzó a la TV para que los políticos y la ONU destinasen más fondos a la lucha contra el cáncer. La enfermedad, en vez de debilitarle, parece que despertó a un león durmiente:

Donal, 12 años, con dos jugadores de rugby de Kerry
«Llorar no me llevará a ningún lugar –dice resuelto–. Lloré el primer día y me prometí que sería suficiente con eso. La vida me ha dado en bandeja de plata demasiadas excusas para que me traten bien el resto de mi vida, pero decidí que no voy a usarlas».

El sostén de la fe
¿Y qué es lo que sostiene a este joven? La respuesta es rápida: su fe. Porque aunque ha buscado y ha preguntado a toda la gente, no ha podido encontrar soluciones que le den tranquilidad aquí: «No estoy enojado o con un sentimiento de injusticia sobre todo esto que me está pasando. Creo que sólo encontraremos respuestas en la vida que viene tras la muerte. No temo la enfermedad o la muerte. Lo que me preocupa es pensar qué le pasará a mi familia después».

Tal vez este pensamiento fue lo que propició que alguien publicara una carta del adolescente en un periódico local en la que contaba su lucha contra el cáncer y, de paso, algo que movió los cimientos de la conciencia de muchos: su lucha por erradicar de Irlanda la «epidémica plaga del suicidio» antes de morir.

Con algunos familiares
Porque aunque su mundo se está derrumbando, Donal piensa en los demás. Y reconoce que no puede sino sentir enojo con los jóvenes que deciden quitarse la vida, «dejando un desastre a sus espaldas» para la familia. Sí, es consciente de situaciones financieras difíciles o de desesperación, pero ¿y lo que él está pasando es fácil?

«Aquí estoy: luchando por mi vida por tercera vez en cuatro años y, en esta ocasión, sin esperanza de curación. No tengo opción e intento preparar a mi familia y amigos lo mejor posible para lo que vendrá, tratando de dejar el menor desastre posible».

Por eso comenta, al pensar en los que se suicidan, «nunca habrá razones tan malas como para tomar la decisión del suicidio: si meditan en ello y buscan ayuda se puede encontrar una solución».

Eso mismo dijo en una entrevista en el The Saturday Night Show, que tuvo mucho impacto. Y cuando el entrevistador mencionó que tal vez Dios lo esté usando para lograr una buena causa, Donal respondió: «si puedo ser un símbolo para que los jóvenes aprecien más la vida, entonces feliz me lanzo adelante y lo hago con gusto».

Y ya está siendo todo un ejemplo, como lo demuestra el premio que la Kerry’s Eye Radio le concedió como héroe local. La nominación a dicho galardón la hizo su profesor de instituto, Ruairi O’Rahilly, que en una entrevista desmiente el dicho popular irlandés que dice «nunca conozcas tus héroes». Así lo explica el profesor: «me siento honrado de decir que conozco a Donal y sé que hablo a nombre de todos en el colegio. Él es desinteresado y encarna todos los atributos que tratamos de inculcar en nuestros chicos».

Donal posando, hoy, para el diario Kerry´s Eye
Héroe o no, Donal sabe que su final llegará más pronto de lo normal. Y por eso sigue luchando, tenazmente, por esa meta que se propuso: arrancar el suicidio de la faz de la tierra.

«Te lo dice un chico de dieciséis años que no tiene voz en su sentencia de muerte, que no tiene ninguna opción ante el dolor que causará y que arriesgaría cualquier oportunidad para pasar aunque sea unos meses en esta tierra: por favor, aprecia lo que tienes, date cuenta de que siempre habrán opciones y de que la ayuda está siempre a tu lado».




domingo, 13 de octubre de 2013






DA CAPO



Coge el agotado corazón como un guijarro
y arrójalo lejos.
Ya no queda nada.
Ya la última onda se extingue
en la maleza.
Al volver a casa, corta zanahorias, cebollas, apio.
Dóralos en aceite antes de añadir
lentejas, agua y hierbas.
Añade luego castañas asadas, un poco de pimienta, sal.
Por último, queso de cabra y perejil. Come.
Puedes hacerlo, créeme, es legítimo.
Vuelve a empezar de nuevo la historia de tu vida.


Jane Hirshfield

miércoles, 9 de octubre de 2013

Psiquiatras advierten del peligro de «inducción al suicidio» con las noticias que se publican en los medios de comunicación




Psiquiatras de reconocido prestigio han advertido del riesgo de que se produzca una "inducción al suicidio" con la proliferación de noticias sobre casos de personas que se quitan la vida por problemas como, por ejemplo, los desahucios.

Este tipo de conductas han sido analizadas en la presentación pública del 21 Curso de Actualización de la Psiquiatría, que se celebra en Vitoria con la participación de más de 400 profesionales sanitarios que trabajan en el área de salud mental de toda España.

Los presidentes de la Sociedad Española de Psiquiatría y de la de Psiquiatría Biológica, Miguel Gutiérrez y Miquel Bernardo, respectivamente, han coincidido en apuntar el peligro del "mimetismo" en los comportamientos suicidas.
Gutiérrez ha recordado que no se puede transmitir la imagen de que en España hay una alta tasa de suicidios, porque, junto con Grecia, tiene de las más bajas de Europa, a pesar de que ahora copan páginas de periódicos y espacios de medios audiovisuales por los casos de desahucios, principalmente.

Ha aclarado que en torno al ochenta por ciento de los suicidios están vinculados a trastornos psiquiátricos anteriores a la situación puntual relacionada con la crisis económica y que, por eso, es un error hablar de causa-efecto en esta cuestión.

El presidente de la sociedad de psiquiatras de España se reconoce "desagradablemente sorprendido" por el tratamiento que están recibiendo los suicidios por desahucios en los medios de comunicación porque es "perjudicial" para el conjunto de la sociedad y para personas que pueden tener actitudes suicidas.

"La conducta suicida es muy compleja como para hablar de causa y efecto y, por ejemplo, en los países mediterráneos hay muchos menos suicidios que en los nórdicos, con crisis o sin crisis", ha aclarado.

Miquel Bernardo ha incidido en que efectivamente hay una "alarma social" en torno a los suicidios por desahucios, pero ha advertido de que no se debe tomar como un fenómeno "epidemiológico" porque, entre otras cosas, no hay dos suicidios iguales.

Han recordado que la Organización Mundial de la Salud hizo públicas unas recomendaciones ya hace muchos años sobre cómo se deben tratar los suicidios en los medios de comunicación, algo sobre lo que ahora se ha abierto la "caja de los truenos".

Bernardo ha reconocido el derecho de los medios de comunicación a informar sobre estos hechos y el de la sociedad a estar informado, pero ha insistido en que este tipo de noticias no deben tener "una recompensa, no deben ser dañinas", caer en el "alarmismo" o en la "inducción" a otros suicidios porque muchos "son evitables".

La jefa del Servicio de Investigación en Salud Mental del Servicio Vasco de Salud-Osakidetza, Ana González Pinto, ha añadido que lo que se debe hacer ante situaciones como la actual de crisis, paro y desahucios es "transmitir esperanza" y decir a las personas que sufren depresión o una presión social que creen no poder soportar que "hay esperanza y tratamiento", y que pueden acudir a un profesional de la salud mental para que les ayude.

González ha recalcado que las plataformas que trabajan para evitar desahucios, que hacen un trabajo social muy legítimo y destacable, deben apuntarse a esta idea de transmitir esperanza a los afectados, porque las personas "que sufren o que tienen una enfermedad mental tienen derecho al optimismo".


http://www.psiquiatria.com/noticias/psiq_general_y_otras_areas/urgencias_psiq/suicidio/58954/

sábado, 5 de octubre de 2013

Del Reiki a la brujería y al intento de suicidio: cuando aceptó a Dios, su vida se reorganizó


Stefan Esztergályos era un joven que vivió los dos últimos años de tiranía comunista en Checoslovaquia en el servicio millitar, muy a su disgusto, pero acercándose a Dios.

El 17 de noviembre de 1989 empezó la “Revolución de Terciopelo” en Checoslovaquia: cientos de miles de personas salieron a las calles y el gobierno comunista colapsó. El 29 de noviembre, el disidente cristiano Vaclav Havel era elegido presidente para conducir el país hacia las elecciones libres.

Así empezaba una nueva etapa en el país. Stefan se sentía atraído por la fe católica, en la que estaba bautizado pero poco formado. Conoció laicos franciscanos, recién legalizados en el país, como otras terceras órdenes para laicos, y con ellos empezó a orar, leer la Biblia y hablar de Dios. Le atraían por algo que no sabía nombrar, pero hoy sabe lo que era: una fe viva y amor sincero a Jesucristo.

El dinero que aleja de Dios
Pero muy pronto Stefan se asentó en la vida adulta como empresario de éxito. “Disfrutaba de mi trabajo, y ganaba dinero. Y con el tiempo, el poder del dinero y el deseo de riqueza y de reconocimiento empezaron a controlarme”, recuerda. Y empezó a distanciarse de Dios y de la vida de oración.

“Un día me di cuenta de que me sentaba en dos sillas, de que tenía dos amos que no se gustaban entre sí”. Sus amigos le señalaban que aún se las daba de cristiano, pero vivía alejado de la fe. Era hipócrita. Desde luego, con su ritmo hedonista, sabía que no le permitirían hacer los votos de laico franciscano en la comunidad.

Había que elegir… y eligió lo fácil: dejar de lado a Dios.

Mística oriental y meditación
Pero el puro materialismo no llenaba su espíritu, y al cabo de un tiempo buscó algo espiritual… ¡que no fuese Dios! Conoció a un hombre que se dedicaba a la mística de religiones orientales, la meditación, con muchas lecturas y practicante de artes marciales.

Stefan conocía poco de su propia fe, de la Biblia y la Iglesia, y el hombre le ofrecía “espiritualidad”, guía, acompañamiento. “Y así cambié al Maestro eterno por uno terrenal e imperfecto”, lamenta hoy.

Con él, profundizó no sólo en la meditación, el orientalismo y las artes marciales, sino en las prácticas de lo oculto, la astrología y el reiki, la supuesta sanación espiritual mediante el manejo de energías y la imposición de manos.

“En vez de rezar, ahora meditaba en soledad, lo que me alejaba de la realidad de la vida. Creé mi propia religión, a mi imagen y semejanza, con lo que me resultase conveniente”, asegura.

Además, ganaba más dinero que nunca, tenía muchos amigos influyentes y se casó –en la iglesia, aparentando ser un buen católico- con una mujer hermosa “a la que aún hoy amo”.

Reiki: una entrada al ocultismo
El reiki era la práctica que más le afectaba, y en la que había profundizado mucho. “Ya era capaz de sanar gente mediante esta práctica. Sentía la energía. Yo estaba convencido de que hacía algo correcto, de que ayudaba a la gente. Hoy sé que esto no es según la voluntad de Dios, y que la forma de obtener esa energía, iniciarse en estas enseñanzas, es ocultismo. Aleja a la gente de Dios y les hace meterse en cosas que no conocen”, advierte Stefan.

Se obsesionó completamente con su “hambre avariciosa de poder y conocimiento”. Gastó mucho dinero en libros de ocultismo y esoterismo.

Aprendiz de brujo... literalmente
Un día, apareció un hombre misterioso en la tienda en la que trabajaba. Le preguntó sobre sus conocimientos y técnicas ocultas. Stefan las comentó. El hombre misterioso las desdeñó: para él, dijo, eran débiles tanteos. “Este hombre era un brujo, que buscaba un aprendiz. Para mí era una oportunidad única, pero titubeé algo. La magia no es un divertimento, es un asunto serio. Él me dio un tiempo para pensarlo”.

Y aprovechando una semana que su esposa estaba en el extranjero en un viaje de trabajo, Stefan acudió a ser iniciado en las enseñanzas del brujo. Y desde ahí, se hundió su vida.

“Esa semana tuve visiones de cosas trascendentes, de criaturas; en mi presencia pasaban efectos extraños: luces que se encendían solas, termómetros que ardían… Y poco después acabé en el pabellón psiquiátrico: las visiones sólo pararon después de tres meses de pabellón cerrado, incontables electroshocks y terapia con medicamentos”.

Dañado y hundido
Este tratamiento dejó a Stefan extremadamente débil y delgado, y con su personalidad dañada. “Era solo un cuerpo: dormía, comía, y fumaba sin parar”.

Después de la segunda hospitalización, su mujer presentó los papeles del divorcio. “En dos meses y 10 minutos de procedimientos perdí a la mujer que antes había querido acompañarme en lo bueno y en lo malo”.

Su trabajo ya no era interesante: nada lo era. Sus amigos le abandonaron. Perdió su dinero. Y aunque sus parientes le habían apoyado, en dos años murió su madre, con la que vivía, que era su sostén en esos años.

“Tenía sueños terribles, sentía que alguien reclamaba mi alma y pedía un precio por las cosas en las que me había metido. Me controlaba una gran incertidumbre y un miedo que no era terrenal”.

Dos veces intentó suicidarse: una con medicinas, otra intentó cortarse las venas. Pero ninguna vez lo consiguió.

Miró a su alrededor. Todos le rehuían. Sólo entre enfermos psiquiátricos encontraba aceptación: gente que estaba tan mal como él.

Y, en cierto momento, se dio cuenta. Necesitaba a Dios, al Creador.

"Y me abandoné en Dios"
“Sólo mi Creador podía ayudarme. Y empecé a confiar en Él. Fue Dios quien me hizo superar mi miedo, mi desconfianza, mi dureza… mediante Su Amor. Me abandoné en Él, y Él me mostró que estaba contento de mi retorno. Si no me hubiera salvado Él, hoy no estaría vivo”.

Recuerda cómo fue la primera vez que Él le "tocó". Stefan acudió a un grupo de oración, “y yo sólo lloraba, y lloraba, y lloraba. Nadie me había amado como Él me dejaba experimentar entonces, y aún hoy. Sólo Él puede amar tanto”.

Llegó una etapa dura pero liberadora: “tomar la decisión cada día, cada mañana, entre vivir con Dios o sin Él”.

Pero sabía que no había nadie más a quien acudir, y nadie mejor. Le entregó su vida “y fue la mejor decisión que tomé jamás”. Y después de tomar esa decisión, las cosas cambiaron.

Quemar miles de euros de ocultismo
Quemó toda la literatura ocultista que tenía, y que valía miles de euros. “No fue fácil, necesité todo un año”, advierte. Stefan quiere dejar claro que quemar el material esotérico era necesario.

“Las personas que se abren a estas enseñanzas y poderes no se dan cuenta de a quién están invitando en sus vidas así. Es un sirviente traicionero y un amo cruel. Al principio crees que tienes poder sobre algo, pero cuando te tiene en su mano y empieza a controlarte, no te libras de él con facilidad. La única solución es acudir al Único que tiene todo el poder en el Cielo, y en la tierra, a Dios”.



Sanación y vida nueva
Con el tiempo su vida se reorganizó. “Muchas cosas se recuperaron, corrigieron y sanaron. Pude perdonar a los que me habían dañado, porque también yo había experimentado el perdón. Volví a encontrar sentido a la vida, nuevos amigos y trabajo. Llevo a otros a que conozcan más a Dios. Pero lo que me hace más feliz es que Dios es mi Señor, realmente presente en mi vida. A quien viva con dudas o desesperación, le animo a que haga como yo: prueba y gusta a Dios, y verás qué bueno es".

Hoy Stefan es fácil de contactar. Tiene un estudio de diseño y fotografía (con hermosas fotos) que se llama ChristianStudio.sk .

 


jueves, 3 de octubre de 2013

«La poesía es un arma cargada de futuro»



Tal es mi poesía: poesía-herramienta

a la vez que latido de lo unánime y ciego.

Tal es, arma cargada de futuro expansivo

con que te apunto al pecho.

No es una poesía gota a gota pensada.

No es un bello producto. No es un fruto perfecto.

Es algo como el aire que todos respiramos

y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.

Son palabras que todos repetimos sintiendo

como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.

Son lo más necesario: lo que no tiene nombre.

Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.



Gabriel Celaya