sábado, 25 de febrero de 2017

La campeona de motocross de USA en silla de ruedas: «Querido Hollywood: ¿Por qué quieres que muera?»


Una vez más Hollywood vuelve a llamar a las puertas de lo políticamente correcto y aporta soluciones como la eutanasia para los que viven en silla de ruedas. Quienes siguen de cerca el mundo de los estrenos habrán estado pendientes de la película que prometía ser la “más romántica del año”. Los actores, de primera línea: Sam Clafin (Juegos del Hambre, Piratas en el Caribe, Blanca Nieves y el Cazador…) y Emilia Clarke (Juego de Tronos). Y el título no podía ser más emotivo “Me Before You”, en español “Yo antes de ti”, basada en la novela homónima de Jojo Moyes.

La trama, a grandes rasgos, es: chico exitoso queda en silla ruedas. Chica comienza a trabajar paseando al chico. Acaban enamorándose y viviendo seis meses maravillosos. Sin embargo, una vida así, en silla de ruedas, no vale la pena ser vivida, de modo que lo inevitable tiene que llegar: el suicidio del chico con la ayuda de la chica.

En “Yo antes de ti” no aparece la parte cruda del suicidio. Demasiado fuerte para un cinta tan romántica. Pero por muy hermosa que fuese la existencia desde que entra en acción la chica, la “calidad de vida”, “la vida digna”, y tantos otros eufemismos llevan al protagonista a su suicidio.

Pero resulta que no siempre la vida es como en las películas. Incluso para bien. Millones de personas con discapacidad optan por vivir lo mejor que pueden su situación personal, al igual que los que tienen "todas las capacidades". Es el caso de Ella French, una chica en silla de ruedas que en julio de este año defenderá su título de campeona de motocross en silla de ruedas (WCMX). Ella ha escrito una dura, pero muy clara, carta a los responsables de la película (que se puede leer íntegra en el portal Moral y luces) en la que defiende la dignidad de su vida aunque de por vida tenga que estar en una silla. Una vida que vale la pena ser vivida, a pesar de esa mentalidad eugenésica del perfecto mundo de Hollywood.



“Querido Hollywood: ¿Por qué queréis que muera?”
Así de claro es el comienzo de la carta de Ella French. Y les vuelve a cuesitionar: “¿Qué tiene de malo una vida como la mía?”. “Estás ahí con tus cuerpos capacitados y miras a las personas que van en silla y sientes pena por nuestra tristes vidas, pero la verdad es que tienes miedo. No quieres ni imaginar que algún día pasaras a ser uno de nosotros. Crees que puedes ser perfecto y que preferirías morir antes que tener partes que no funcionan bien”, acusa a los responsables de la película. Para concluir: “Pues me parece muy triste”.

La joven que vive en silla de ruedas denuncia la falta de rigor de la película: “La idea de cómo es mi vida te molesta tanto que ni siquiera muestras lo que hay de verdad en ella en Yo antes de ti (…) ¿Os habéis documentado siquiera? ¿Habéis preguntado a personas que van en silla de ruedas si preferirían ser un cadáver antes que un lisiado?”.



“Debería daros vergüenza”
French denuncia una vez más las actitudes políticamente correctas: “Una señora me dijo una vez que era humillante usar la palabra ‘discapacitado’ y que en vez de eso debería decir ‘de capacidad diferente”. Para French, eso es una tontería: “Mis piernas no funcionan. Estoy lisiada. Es un hecho de mi vida y tú deberías aceptarlo”.

“Si de verdad te importara algo lo que yo pensara y me quisieras tratar como a una persona –les recrimina la joven norteamericana-, entonces no harías películas sobre cómo lo más bonito que podría hacer por mi familia sería quitarme de en medio. Debería daros vergüenza”.

Podría haber sido una gran película, una historia de amor maravillosa en donde uno de los protagonistas usa una silla. Son cosas que pasan: “Los enamorados no piensan en la silla. Son los demás los que le dan tantísima importancia. La cosa de las sillas es que son sólo eso, cosas. Son mis piernas. Así me muevo. Y ya está”, remata Ella.

“Vivir sin Dios te ha vuelto cruel”
Ella French es una joven creyente, y de su fe saca fuerzas: “Puede que no creáis en Dios. Pero yo sí creo y, gracias a eso, creo en el valor de todas las personas. Creo que todos estamos hechos a Su imagen y semejanza. Por esto creo que todas las personas tienen una dignidad”, señala.

Es Dios quien da valor a las personas, no los hombres, por eso “si crees que las personas sólo reciben su valor de otras personas, entonces las otras también pueden quitárselo. Pero si tu valor viene de Dios, entonces nadie tiene derecho a decir que alguien que ande es más digno que otro que no ande”. Y remata: “Tal vez deberías buscar a Dios otra vez, porque vivir sin Él te ha vuelto cruel”.



“Vivo una vida increíble”
Son dos puntos de vista, pero mientras los responsables de la película “lloran” por el protagonista, Ella cuenta que “va a estar ahí fuera viviendo la increíble vida que ni siquiera te has molestado en saber que es posible: Tengo amigos, hacemos fiestas de pijama, vivo una vida normal. Una vida que no me hace querer morir”.

Es más, una invitación: “Y si quieres ver lo que de verdad es una vida en silla de ruedas, puedes venir a pasar el rato conmigo en julio a Venice Beach, California, mientras defiendo mi título de motocross en silla de ruedas (WCMX)”.

Y continua: “Porque mientras tú estabas pensando que vivir en silla de ruedas te haría desear la muerte, yo estaba demasiado ocupada convirtiéndome en patinadora profesional, aprendiendo a hacer caballitos, a grindar y a hacer backflips en el skate park. Mi silla no sólo vuela al bajar por las rampas, también me enseña quiénes son los auténticos haters”.

Para concluir una invitación: “Espero que tu próxima historia sea mejor que ésta"

http://www.religionenlibertad.com/campeona-motocross-usa-silla-ruedas-querido-50214.htm

martes, 21 de febrero de 2017

Rosa mística





Era Ella,
y nadie lo sabía.
Pero cuando pasaba
los árboles se arrodillaban.
Anidaba en sus ojos
el Ave María.
Y en su cabellera
se trenzaban las letanías.
Era Ella.

Era Ella.
Me desmayé en sus manos
como una hoja muerta,
sus manos ojivales
que daban de comer a las estrellas.
Por el aire volaban
romanzas sin sonido...
Y en su almohada de pasos
me quedé dormido.

Gerardo Diego

domingo, 19 de febrero de 2017

La psicoterapia cristiana




1-      Concepto de Psicoterapia.- La Psicoterapia es el tratamiento de las enfermedades y trastornos nerviosos por medio de la sugestión o persuasión y en general, por el trato con el psicoterapeuta. La psicoterapia es ante todo, cuestión de relación humana. El psicoterapeuta interviene en la curación de los trastornas caracteriales, neuróticos o psicosomáticos y pone en juego tanto su personalidad como su saber, pues debe despertar en el enfermo confianza y receptividad.

2-      Concepto de cristiana.- Cuando hablamos de cristiana nos situamos obviamente en el punto de vista de la experiencia cristiana de la “vivencia” cristiana”, del lugar central que en ella debe ocupar la persona histórica de Jesucristo, Hijo de Dios, Salvador Señor y Mesías, que es aceptado por la fe y la conversión en la vida, y donde se asume un compromiso con Cristo en la fe de la Iglesia. El es considerado médico de cuerpo y almas, ya que el pasó en su vida sanando los corazones heridos y haciendo el bien y liberando de todos los males físicos, psíquicos y espirituales.

3-       Concepto de psicoterapia cristiana.- Es una corriente psicoterapéutica que une todos los elementos de la psicología, la psicoterapia científica, con los elementos propias de la fe cristiana, y creencias que le ayude al paciente curar sus heridas emocionales, afectivas, psicosexuales, recuerdos dolorosos, traumas, complejos de superioridad, de inferioridad, etc., poniendo la fe no solamente en las técnicas psicoterapéuticas que son buenas, pero que además van unidas la fe en Jesucristo médico de cuerpos y almas, que creemos que puede como Señor de la Historia, del pasado, del presente y futuro curar a la persona interiormente y hasta físicamente se habla de que Jesucristo es el sanador de la persona humana.

Fuente: Psicoterapia cristiana – sanación interior. Padre Juan Ernesto Iriarte Blas

miércoles, 15 de febrero de 2017

La "santa muerte" y los suicidios de Ciudad Juarez



«Los que pactan con la Santa Muerte no están protegidos; es un demonio que se ha hecho muy popular»



«Los que pactan con la Santa Muerte no están protegidos; es un demonio que se ha hecho muy popular»
Muchos entran en el culto a la Santa Muerte pensando que les protegerá de cosas malas o les aportará beneficios... como sucede con las mafias, es más bien lo contrario



Un reportaje de Gustavo Cabullo en la revista mensual mexicana Revistanet.mx se acerca al problema de la magia negra y lo satánico en Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos, que con 1,3 millones de habitantes es una de las ciudades con más violencia de México (2.600 muertes violentas en 2009).

Algunos casos especialmente terribles por sus detalles escabrosos, incluso rituales hacen pensar que ese ambiente de violencia se integra en el culto siniestro a la “Santa Muerte” y el recurso a la brujería y lo demoníaco. Esto se ve no sólo en casos de asesinato sino también de suicidio.

El Padre Eduardo Hayen Cuarón, párroco de la Catedral de Ciudad Juárez, explica que los temas de brujería o satanismo son cotidianos. “Cada día que llego y me siento en el escritorio de esta oficina no falta una persona, dos, tres o más que venga a presentar este tipo de situaciones que está viviendo; algunas se solucionan con una bendición y una oración, pero otras necesitan oraciones más fuertes, de liberación, de exorcismo, porque están verdaderamente asediadas por espíritus malignos”.


El padre Eduardo Hayen Cuarón atiende cada día en
su despacho de la catedral uno o más casos ligados
a lo demoníaco o la brujería

"Un muchacho entraba en trance y ya no volvía"
Explica distintos casos a la revista. Uno de ellos es el de un menor de 17 años que fue abordado por un demonio. “Un espíritu demoniaco venía al joven, entraba en trance y entablaba un diálogo con la familia. La familia quedó muy asustada cuando el muchacho ya no regresaba del trance, se quedó totalmente poseído por este espíritu que no salía. Tuvieron que recurrir al sacerdote para hacer un exorcismo. Fue liberado el muchacho, gracias a Dios. Fue un caso que tuve, impresionante”.

Cuenta que en otra ocasión lo visitó una mujer de rasgos rudos, semejantes a los de un hombre. “Llegó una mujer que yo pensé que era un hombre. Yo le vi cara de hombre, cuerpo de hombre, todo de hombre y cuando me dijo que era una mujer me dio pena decirle, llamarla, tratarla como una mujer porque yo veía un hombre. Cuando empezó a contarme toda su historia empezó a entrar en un trance impresionante. Se tiró al suelo, empezó a gritar y a arrastrarse como una culebra, a retorcerse por todas partes. También quedé muy impresionado con ese caso”.

Buscando un exorcista
Hay personas que llegan a Ciudad Juárez desde Estados Unidos o desde otras zonas de México buscando un exorcista, pero la diócesis aún no tiene un exorcista oficial y muchos casos los examina el padre Hayen.

“Una señora de Monterrey llegó con su hijo, malísimo, era un poseído que había participado en ritos satánicos y que vio algo tan impresionante que quedó mal para toda su vida, hasta ahorita el chico no se ha liberado, sigue poseído”, señala el sacerdote.

Ciudad Juárez está en un proceso de discernimiento acerca de la necesidad de un exorcista oficial. Hayen detalla que debería ser “un sacerdote que tenga prudencia, juicio, edad y madurez para dedicarse a esto”.
Comenta que es un ministerio que exige mucho esfuerzo y que, además, aunque hay muchas personas que atender, no es bueno que el sacerdote se dedique exclusivamente a hacer sólo exorcismos. “Podría quedar afectado, un sacerdote que tenga todos estos casos, no es fácil”, supone el religioso.

Las características del exorcista
“Debe ser un sacerdote primero probado en virtud y en santidad, que sea una persona verdaderamente santa, un hombre de oración, que tenga conocimientos teológicos y psicológicos aceptables para esto; una persona que sea piadosa, que lleve una vida de oración, que tenga buen sentido de discernimiento, buen juicio”, enumera.

También ha de distinguir los casos de enfermos psicológicos de los que muestran actividad demoníaca. “Nosotros ya conocemos cuáles son los síntomas de una persona que está siendo asediada o poseída por espíritus malignos; fuerza descomunal, hablar lenguas extrañas, vomitar espuma, mucha espuma, inclusive metal que después aparece en su casa, en su cama, pelos que no se sabe de dónde vienen, en grandes cantidades”.


Una imagen de la Santa Muerte justo ante la catedral de Ciudad Juárez... es un culto que invoca una protección demoníaca, que, además, engaña y no protege

Lo demoníaco y los papas
El padre Hayen insiste en que lo demoníaco es real: “Hay teólogos y sacerdotes que niegan esta realidad, que el demonio existe y actúa; hay sacerdotes que no creen y teólogos que lo niegan, pero lo han dicho los papas. Un católico que niega esta realidad se sale de la comunión con la Iglesia, esto está en el catecismo de la Iglesia Católica y los papas han dado catequesis sobre el demonio, por lo tanto no se puede negar esta realidad que durante muchos años se negó, no por la autoridad de la Iglesia, por el magisterio, sino por teólogos y sacerdotes”, aclara.

En mayo de 2013 el sacerdote mexicano Juan Rivas llevó ante el Papa Francisco a una persona que sufre de actividad demoníaca y el Papa Francisco oró por ella imponiéndole las manos en un vídeo que fue muy difundido.

Cuando el endemoniado grita en misa
Hayen ha visto casos de personas que entran en trance demoníaco durante la misa, y caen al suelo, se revuelcan y retuercen o gritan. ¿Qué hace cuando ocurre esto? “Yo tranquilamente digo que retiren de la misa a la persona, porque la misa no se va a convertir en un espectáculo en el que todo mundo va a estar viendo qué sucede. Lo mejor es que se retire. Uno de los síntomas de una molestia demoniaca, infestación demoniaca o posesión demoniaca es la aversión a lo sacro, a lo sagrado”.

Describe otro caso. “En la Divina Providencia, que era mi parroquia anterior, empezamos una misa y una persona entró en trance, se puso muy mal, era una mujer, una señora que tenía problemas de posesión demoniaca u obsesión y la tuvieron que retirar”.

Añade que “buscamos siempre dar un seguimiento a estas personas. Las personas que empiezan un proceso hay que darles un seguimiento, la liberación de espíritus malignos no es cuestión de una sesión. Muchas veces en las películas se ve así, como en la de El Exorcista, donde le hicieron un exorcismo a una niña y se le salió el demonio para siempre. No, así no es la realidad, es un proceso, es como ir con el doctor a que te da una receta, que te haga alguna curación y después regresar muchas veces”.

De la famosa película de terror quiere decir que la escena de la niña “que le da vueltas la cabeza en 360 grados, es imposible; se muere la persona y una niña que se deforma a ese grado, su cara, su cuerpo, tampoco es creíble”.

En cambio, El Rito, cuyo actor principal es Anthony Hopkins, sí se “se asemeja más a los exorcismos reales”, refiere.

La Santa Muerte: una falsa seguridad siniestra
En el caso concreto de Ciudad Juárez se da la confluencia de crimen, violencia, miseria y el culto supersticioso a la Santa Muerte.

Sus devotos buscan poder y seguridad en una ciudad llena de asesinatos y suicidios: intuyen que la Muerte tiene el poder, controla las vidas y los acontecimientos, y piensan que se puede pactar con ella, servirla, consagrarse a ella, tomarla por Señora… todo tipo de pactos pensando que así los protegerá, que no los castigará.


Una mujer bautiza a su bebé en el culto a la Santa Muerte, pensando que eso le aportará protección o prosperidad

Desde la Iglesia, por supuesto, se considera que es una mezcla de superstición y de pacto con lo demoníaco.

Respecto a los que pactan con la Santa Muerte, el padre Hayen es claro: “No están protegidos y están abiertos a que les sucedan cosas que son obra del diablo, porque la Santa Muerte es un demonio, se ha vuelto muy popular por ignorancia religiosa, sobre todo cuando uno no tiene al Dios verdadero presente, se abre a cualquier tipo de creencias, incluso estas demoniacas, que son peligrosísimas”.

Como quien pacta con una mafia esperando cierta protección, muchos que se involucran en rituales o relaciones con la Santa Muerte terminan viendo que el precio es alto. “Estos espíritus, bajo este mundo tenebroso empiezan a influir en las vidas. Empiezan a surgir más enfermos mentales, personas trastornadas, efectos en las casas y en lo material; llaves que se abren solas, casas donde se ven sombras y todo ese tipo de fenómenos que ocurren por prácticas esotéricas y brujería”, afirma Hayen.

Una crueldad extrema y un combate espiritual
El sacerdote tiene claro que Ciudad Juárez es especial. “Una ciudad donde veíamos decapitados, torturados, gente que moría con una crueldad inaudita no es obra solamente del hombre, sino del espíritu del mal que se apodera de las conciencias, de los corazones”, apunta.

Por eso, añade: “El mal no sólo se combate con policías, ejercito o educación, se combate con las armas del Espíritu Santo”.

Él y más personas en la ciudad proponen que Ciudad Juárez sea exorcizada y llegue a contar con un exorcista oficial, como ya tienen otras ciudades del país (Ciudad de México, Guadalajara y Querétaro entre ellas; también los hay en España –Madrid, Barcelona, Murcia-, en Dinamarca, Australia, Malta, etc…).

“Si se saca al Dios verdadero de nuestras vidas, ese vacío lo vamos a tratar de llenar con otra cosa y el hombre de hoy lo está llenando con superstición, brujería, con magia blanca o negra que, aunque pretenden diferentes cosas, es una invocación a los demonios”, insiste el responsable de la catedral.


Los cultistas piensan que con la muerte se puede pactar, o negociar, o lograr beneficios a cambio de servicios

Las "soluciones" de los brujos
Por supuesto, los devotos de la Santa Muerte tienen sus propias explicaciones a la violencia de la Ciudad, que ellos atribuyen a una deficiente gestión de la circulación de espíritus difuntos.

El reportero consulta a “a una bruja negra, a Lukcero Aghakán”, devota de la Santa Muerte, quien pide “regar por las calles frutas o flores para que esas entidades, energías o almas perdidas, puedan atravesar el limbo”, además de quemar sándalo, inciensos de lágrima, mirra y copal.

El padre Hayen comenta que eso no serviría de nada. “Volvemos nuevamente a prácticas mágicas. Los demonios no se pueden expulsar con los demonios. Lo que se debe hacer son exorcismos por parroquias, oraciones de liberación e invocar a San Miguel Arcángel como protector de la ciudad”.


Muchos que se han alejado de Dios buscan alianzas y seguridades -y a veces mera comunidad- en otros cultos a "fuerzas" alternativas

Buscar el bien aunque el mal parezca reinar
El sacerdote recuerda, eso sí, que incluso rodeados por el mal es posible descubrir el bien y sentirse atraídos por él. “Yo pienso que muchas veces en la crisis está también la oportunidad. Cuando una persona cae en una crisis existencial, profunda, se abre a que alguien venga a sacarla. Es cuando puede invocar a Dios desde el fondo. El hambre de sentido, de paz, de alegría, de alguien que busca un motivo para vivir, hace buscar a ese poder superior que llamamos Dios”, explica.

Y ante la espiral de violencia en la ciudad, se reafirma en el compromiso de las personas con autoridad a favor de la vida y la paz. “Yo creo que los últimos que abandonaríamos el barco seriamos los sacerdotes y los políticos, no vale salir corriendo en una crisis así, al contrario, se necesita estar con el pueblo, con la gente para darle esperanza y consuelo”

http://www.religionenlibertad.com/los-que-pactan-con-la-santa-muerte-no-estan-protegidos-es-45575.htm

lunes, 13 de febrero de 2017

sábado, 11 de febrero de 2017

No te duermas, Señor






No te duermas, Señor,
y cuídanos la barca.
La barca Tuya y nuestra.
Mira que va cargada
de los que Tú llamaste
y si ha levado anclas
es porque prometiste,
un día, gobernarla.

Hemos echado redes
en alta mar y en aguas
tan lejos de la costa
que si alguno naufraga
ya no podrá volver...
¡Redes de amor lanzadas
fiando solamente
en Ti y en tu palabra!

No te duermas, Señor,
y cuídanos la barca.
¡Haz que no falte nadie
si regresa a la playa!

Ernestina de Champourcin