No se sabe quién tuvo la funesta
idea, pero se ha convertido en una mortífera moda entre adolescentes de
países anglosajones, especialmente en Estados Unidos y Canadá. Una joven
–la idea ha cundido más entre las chicas- se planta ante una
cámara, generalmente en su habitación, portando un taco de tarjetones en
su mano.
Motivos para el suicidio
En ellas ha escrito, con caligrafía grande, los
motivos por los que ha decidido suicidarse, y va mostrando a la cámara,
lentamente y sin decir una palabra, cada una de las tarjetas. Abusos
sexuales, bullying en el colegio, la muerte de
algún ser querido, un asfixiante complejo de inferioridad, no encontrar
sentido a la vida, una terrible soledad… Los tarjetones se van
sucediendo ante la cámara con un ritmo pausado y macabro. Cuando llega a
la última, la joven se acerca a la cámara y oprime
el botón de apagado. Después cuelga el vídeo en Youtube. Unas horas más
tarde, su cuerpo yace exangüe sobre el suelo de la habitación.
Una historia terrible
El último caso ocurrió hace menos de un mes, cuando
la canadiense Amanda Todd, de apenas 15 años de edad, decidió poner fin
a su corta y atormentada vida.
Amanda, una niña alegre y sin complejos, había
cometido un terrible error: se mostró desnuda ante un desconocido al que
había contactado por internet.
Durante dos años, este sujeto -un adulto que se
hacía pasar por adolescente- la amenazó con publicar sus fotos si no
cedía a sus chantajes. De nada valió que la chica se plegara a sus
exigencias: un día, sus fotos aparecieron colgadas en
la red. Esto, unido a las burlas y humillaciones a las que la sometieron
sus compañeros, fue demasiado para su psicología. Tras seguir el ritual
de colgar el vídeo en el que explicaba, vía tarjetones, los motivos que
la habían conducido al suicidio, se quitó
la vida.
“Tengo un pasado y tengo mis secretos”
Pero, quizás, nadie mejor para entender a un
adolescente que otro adolescente. Por eso ha causado furor en las redes
sociales el vídeo grabado por una joven de 15 años.
“¡Hola! Me llamo Cassie”, saluda sonriente a la
cámara mostrando sus tarjetas. Su “look” es informal y “grunge”, con dos
piercings asomando por el labio inferior y un marcado contorno de ojos
negro. “Tengo un pasado y tengo mis secretos”,
añade.
Después muestra otro tarjetón con un nombre y una
fecha: “Sara Ranae. 1973-2005”. “Era mi madre”, se lee a continuación,
mientras su semblante se nubla y entristece. “Yo tenía 9 años. Ella se
quitó la vida”, explica. Tras mostrar a la cámara
la foto de ellas dos, una lágrima comienza a rodar por las mejillas de
Cassie.
Eres importante... Dios te ama
“El 24 de octubre de 2010, sobre las 2:45 de la
madrugada, yo estaba tendida sobre el cemento. Me había tratado de
cortar las venas”, se lee en las siguientes tarjetas que muestra a
cámara.
“Fea, inútil, irrelevante. No tenía razón para
vivir”, prosigue. “Pero, escúchame. Ahora sé que estoy aquí por algo. Y
tú también. Eres importante. Eres precioso. ¡Eres amado! Y Dios te ama”,
afirma con convicción Cassie, que continúa enseñando
las tarjetas a la cámara.
“He sido anoréxica. He tenido depresión. He estado
al borde de la muerte… Como mi madre. Hago esto por ti, mamá. Te quiero.
Te querré siempre. Tengo un pasado y tengo mis secretos. ¡Ahora también
tengo un futuro!”, concluye.
Más de un millón y medio de visitas
El vídeo lleva más de 1,5 millones de visitas y
alrededor de 22.000 comentarios. “Quédate en el mundo; has ayudado a
mucha gente, entre ellos a mí”, escribe una joven.
“Cada vez que me siento mal o deprimida veo este vídeo y hace que me encuentre mucho mejor”, confiesa otro internauta.
"Me puse un cuchillo en el pecho y... vi el vídeo"
“No dejes de creer en el amor de Dios que has
encontrado, ni dejes de ser tú misma. Hay tanta gente que necesita
testimonios como el tuyo… ¡No estás sola! Dios te bendiga”, le pide otra
chica a Cassie. Pero uno de los comentarios más impactantes
quizás sea el de una niña de 10 años: “Estoy sola y no me siento
querida. Me puse un cuchillo en el pecho, pero vi este video. Me has
salvado, y sé que te importo, Cassie”.
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