miércoles, 17 de septiembre de 2008

Un mes con Eva (17)

Y esta promesa, Eva, sin tu esfuerzo, sin tener que aparentar ser alegre y preocupada por los demás, porque “en esto consistía el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y nos envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados”. 1 Juan 4, 10

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Todos los comentarios son bienvenidos, este es un espacio de escucha y oración.