Me canso de sufrir y digo: ¡basta!
Apelo a un tribunal que se demora.
En el banquillo espero hora tras hora
con un anhelo vivo que me gasta.
Llega la sombra de la noche hastaApelo a un tribunal que se demora.
En el banquillo espero hora tras hora
con un anhelo vivo que me gasta.
que me ennegrece entera. Evapora
mi silueta encogida y rezadora
que en otro Pecho su gemido engasta.
Ningunos ojos mi llorar socorren.
La Justicia y la Fe me desamparan.
Nadie viene a medir mi desconsuelo.
Las lágrimas me queman, me recorren.
De pronto las cortinas se separan.
Dios se asoma. ¡Me alarga su pañuelo!...
Sagrario Torres.
Guau... me hiciste sentir tanta angustia con tus versos...
ResponderEliminarHas el final, donde sentí que podía respirar.
No concibo la vida sin el Consuelo y la Misericordia de Dios.
Un poema muy profundo y sensible.
Cariños.
Hola Edit. Me alegra que te guste, pero no son míos, sino de una excelente poetisa manchega llamada Sagrario Torres, ya fallecida y que Dios debe tener en la Gloria excelsa de los poetas. Te pego unos enlaces para que la conozcas mejor.
ResponderEliminarhttp://fjtorres.atwiki.com/page/Biografia
http://www.poemasde.net/poemas-de-sagrario-torres/
Un abrazo. Buen domingo del Señor.
Que poema más hermoso, casi siempre es lo que nos pasa, bueno lo digo por mí, con angustias, y siempre el Señor dispuesto a brindar su ayuda. Y como no, si somos sus hijos.
ResponderEliminarSaludos José.
Te he extrañado.
Besitos.